Hacer un juego de rol en el sexo es todo una nueva aventura que solo de imaginarla nos llena de adrenalina y excitación. Este tipo de dinámicas sexuales, nos ayudan a explorar aspectos de la intimidad que suelen ser un tema no tratado porque simplemente no nos atrevemos a hacerlo.
Uno de los problemas más significativos en este aspecto, es la desconfianza o el miedo que tenemos. El desconocimiento de qué es y cómo se puede hacer un juego de rol nos hace pensar que nos veríamos ridículos si lo intentamos.
En sexy shop la juguetería para adultos, contamos con muchas herramientas que te hacen volar la imaginación con los juegos de roles. Y sugerimos a nuestros clientes investigar más para poder hacerlo con más confianza cuando llegue el momento.
Lo más importante, es saber que la pareja juega un papel muy importante para crear comodidad en el ambiente. Además, los juegos de roles nos permiten explorar aspectos de la sexualidad que en condiciones convencionales no nos atreveremos.
¿Qué son los juegos de rol en el sexo?
Un juego de rol o el role-playing, no es otra cosa que asumir un papel distinto al que tienes en la realidad y divertirse disfrazándose o ejecutándolo. Está asociado a nuestras fantasías sexuales.
Algunos jugueteamos en la imaginación con tener una secretaria que se nos siente en las piernas y nos vuelva locos al cerrar la puerta. Y otras lo que queremos es que aparezca un uniformado y nos lleve presas. Justamente se trata de cumplir con estos deseos para hacer del sexo algo excitante y entretenido.
Nuestras limitaciones
Los encuentros íntimos se rigen por los códigos que nosotros le damos según nuestras creencias y valores. El qué, el cómo, el cuándo y el con quién de nuestras relaciones sexuales, limitando hasta nuestra manera de disfrutar el erotismo sexual. Estos aspectos han sido introducidos en nuestras referencias desde los primeros años de nuestra infancia. Muchos sobre la base del temor. Por esa razón, aunque en algunas ocasiones tenemos fantasías al respecto, la verdad es que nos sentimos inseguros e incluso aterrados.
Y si bien hay limitaciones que cada quien debe respetar en torno a los medios logísticos, también es necesario entender que muchas de esas limitaciones no son más que miedo.
Por ora parte, sabemos que en los últimos años se ha asociado a los juegos de roles en el sexo con algunas distorsiones sexuales. Se vincula a veces con la violencia dentro de un encuentro erótico lo que puede sin duda darnos miedo y no tomar en cuneta para nada esta práctica. Pero lo cierto es que jugar en la intimidad puede ser muy divertido y menos amenazante.
¿De qué me puedo disfrazar?
Es una excelente herramienta para disfrutar relajadamente del juego erótico. Si deseas cumplir tu fantasía de forma sana y segura, no lo pienses más, te ayudamos a conseguirlo. Prueba primero con lencería básica pero coqueta, y después con algo más atrevido. Intenta conocer cuáles son las fantasías sexuales de tu pareja y comunícale las tuyas y así paso a paso le vas poniendo picante.
Las opciones son muchísimas, porque hay muchos tipos de roles, policías, secretarias, enfermeras, bomberos, mascotas, dueños, dominantes y sumisos, tantos como tu imaginación te permita.
Muchas personas pueden encontrar que el juego de roles les permite desinhibirse, ser más auténticos y creativos. Los juegos eróticos nos permiten salir de las posturas tradicionales y comenzar a incorporar comportamientos que no se parecen a nosotros. Cada vez que conseguimos poner en práctica una nueva postura o juego de forma exitosa, lo incorporamos a nuestro repertorio personal. De ésta forma favorecemos nuestro desempeño sexual y enriquecemos nuestra relación de pareja.